Toda Luna nueva es un portal que abre oportunidades, bajo cuya influencia, de atrevernos, como las serpientes podremos cambiar de piel. Venimos de la Luna llena en el signo opuesto, Aries donde se pone en manifiesto la individualidad vs. las alianzas, que nos llevan a un accidentado nosotros, más deseoso del yo que del juntitos.
Estamos casi entrando a la recta final del año, vienen los recuentos y las preparaciones para el otoño. Virgo es el signo que hace la transición entre el verano y el otoño, época en la que empieza a disminuir la luz y se marca el inicio del viaje interior.