La conjunción Júpiter - Neptuno en Piscis, 2022, una sola vez en la vida.
Por todos lados hoy 12 de abril de 2022, se habla de que habrá un despertar espiritual masivo. ¿Qué esta pasando se dirán?
Es que los dos planetas Júpiter y Neptuno, convergen en el signo de Piscis dando paso a un despertar o escape colectivo. JÚPITER, el planeta de la sabiduría, de la verdad, la expansión y la abundancia, hoy se alinea en una conjunción con NEPTUNO, el planeta de la disolución, la imaginación y la ensoñación en el signo, que por así decirlo, es el hogar de ambos, el signo de Piscis.
Esto ocurre por primera vez desde el 17 de marzo de 1856, desde hace 165 años. Y volverá a suceder en el 2188. Nadie que esté por aquí lo podremos presenciar. De ahí la relevancia de este evento que tiene lugar una sola vez en la vida.
Importante señalar que cuando dos planetas hacen una conjunción, es decir que están en el mismo grado, esta marca el inicio de un nuevo ciclo. Este ciclo puede implicar un importante despertar, uno que otro milagro o gran decepción tanto a nivel colectivo como personal.
Estos dos poderosos se reúnen en distintos signos cada 12 - 13 años. Cuando lo hacen nos ayudan a expandir nuestros talentos espirituales y artísticos, nuestras creencias y lo que sea que requiera un empujón. La última vez que esto sucedió fue en el 2009. En ese año Obama nominó a la tercer mujer y la primera de color, Sonia Sotomayor, a la Suprema Corte de Justicia, financieramente este tránsito estuvo muy cerca del final de la gran recesión que duró del 2007 - 2009 y finalizó la guerra de Sri Lanka.
Hoy 12 de abril o se abre la puerta al mundo de los sueños o el de la disociación. Porque todo evento tiene su lado B. A la vez se abre la posibilidad de encontrarle sentido a lo que generalmente resulta confuso, abrumador e incomprensible.
Se amplifican los temas Piscianos: el misticismo, el amor desbordado, la unión, la armonía, la confusión, el alcoholismo, las drogas, el ghosting, el gaslighting, la depresión, la decepción, la tristeza, la histeria, el caos y el sentirse fuera de control.
A través de Júpiter conformamos nuestros conceptos filosóficos, tendencias intelectuales, ideas conscientes, el pensamiento y la síntesis que hacemos de nuestro entorno. Es el que nos ayuda a encontrar significado, algo así como nuestra filosofía de vida.
Las partes de nuestra vida que consideramos importantes, que defendemos y por las que luchamos a capa y espada. Son esos pensamientos que le dan forma a la manera en que vemos al mundo. Son los valores que pensamos deben moldear nuestras vidas.
El encuentro en Piscis de estos dos planetas potencia el amor, la creatividad pero también el escapismo que es algo de lo que fomenta NEPTUNO. Porque genera una bruma por donde circula, una que puede servir como inspiración o como bloqueo. Bajo su influencia cuesta trabajo diferenciar la verdad de la mentira. La distorsión de la realidad es la moneda de cambio.
Piensen en el mundo de la película Matrix, uno en el que los humanos no saben que están atrapados en una simulación de la realidad. Realidad que crearon unas máquinas sintientes para distraer a los humanos y usar sus cuerpos como fuentes de energía. Algo así sería el ambiente.
Por lo que hay que tener las antenas afuera. Porque somos propensos al engaño, a estafas, a fraudes ahora que está tan de moda y que hay tantas maneras de engañar, tengamos especial cuidado de no caer en la trampa de un defraudador.
Si algo en la tripa nos dice que es demasiado bueno para ser cierto lo más probable es que lo sea. No hay que dejarse de cuestionar, no hay que tener miedo a preguntar y a parecer un tonto, no hay que tener miedo al qué dirán de nosotros. Revisemos lo que llegue.
Lo que representa Neptuno es algo vago, difícil de traer al consciente y de ponerlo en palabras. Porque su verdad es la verdad ulterior, la universal, que no se explica con palitos y bolitas. Tiene que ver con las realidades artificiales, como el cine, la literatura, los video juegos, las sustancias que alteran la conciencia como las drogas y el alcohol. Todo aquello que nos permite escapar. También está relacionado a los movimientos espirituales.
La verdad de Neptuno es la de los terrícolas en conjunto y en relación al resto del universo. Es el planeta que representa nuestra conexión con el yo supremo y nuestra naturaleza divina. Representa los valores sobre los que actuamos sin pensar ni cuestionarlos porque no dependen de la lógica para su existencia. Son los valores alrededor de los que quisiéramos moldear nuestra vida. La verdad es esa a la que regresamos una y otra vez porque nos ancla y da sentido.
Este evento nos impactará a todos pero sobre todo a Virgo y Piscis. Busquen dónde tienen a Júpiter y Neptuno en su carta para saber el área de vida en la que se manifestará. (Vayan a esta página y piquen charts and calculations para que saquen su carta).
Júpiter, es el planeta más grande del sistema solar. Todo lo que toca lo magnifica y no sabe decir no. Por eso al hacer contacto con Neptuno podemos ser incapaces de reconciliarnos con la realidad y preferir un mundo de fantasía del que despertar será rudo.
Por cierto en 1856, nace Sigmund Freud, lo cual es importante porque su trabajo está impregnado de las cualidades de esta dupla. Freud es quien le da nombre y apellido (Júpiter) al inconsciente (Neptuno). Es el padre del psicoanálisis, “del estudio de las motivaciones inconscientes que provienen de la infancia”. De considerar a los seres humanos “divididos por impulsos instintivos anárquicos en vez de por la razón”. (1)
Soñar hoy parecería imposible, el futuro es tan sombrío que duele si quiera pensar en desear un mundo mejor porque se predice imposible. La desolación, desesperanza y pesimismo ocupan no sólo los encabezados informativos sino los titulares de nuestras vidas.
Pero abril es de los meses más generosos del 2022, se dice en el mundo astrológico. Y hay una manera de encontrar sentido donde no lo hay, donde no lo hubo. Fomentar la imaginación, llenar los espacios con un nuevo vocabulario de nuestro imaginario para que surja una nueva visión
Esta conjunción de Júpiter y Neptuno no va a alterar nuestras vidas tangiblemente pero algo fundamental se va a mover. Algo acerca de nosotros, de nuestro propósito y relación con el mundo.
Es pertinente preguntarnos:
Si quisieras hacer algo importante significativo, con quien lo quieras compartir o ¿a quién querrías de cómplice?
¿Cuál es nuestro lugar en el mundo?
¿Cómo entrar en contacto con nuestra sabiduría interna? No la de los demás, la de nuestra pareja, hermanos, padres, si no la nuestra. Nuestra brújula personal.